El duo dinámico: Bradyrhizobium y Azospirillum en la co-inoculación de la soja
La fijación biológica de nitrógeno (FBN) en la soja es esencial.
La FBN convierte el nitrógeno atmosférico en una forma asimilable para las plantas, gracias a la nitrogenasa, una enzima en bacterias fijadoras de nitrógeno. Esta simbiosis entre bacterias (rizóbios y bradirizóbios) y plantas proporciona nitrógeno fácilmente asimilable.
La reacción se representa por la ecuación: N2 + 3H2 → 2NH3.
Una dosis de inoculante (Bradyrhizobium japonicum) puede fijar lo equivalente a 250-300 kg/ha de nitrógeno, comparable a 600 kg de urea. Comprar este nitrógeno costaría más de $300/ha, posiblemente inviable para la soja. En cambio, la inversión en un inoculante de $2-3/ha atiende la demanda de manera eficiente y sostenible.
La re-inoculación anual aumenta la productividad en un 8.4%, ya que las bacterias en el suelo anterior producen baja nodulación e ineficiente FBN.
Investigaciones recientes han demostrado que la co-inoculación de Bradyrhizobium y Azospirillum puede aumentar la productividad en un 8-10%, promoviendo un mayor desarrollo de raíces y suministrando más nitrógeno directamente a las plantas.
La co-inoculación satisface la demanda de soja de alto rendimiento con sostenibilidad agrícola, económica, social y ambiental.